LA TEMERARIA MODA DEL BATONING EN EL USO MODERNO DE LOS CUCHILLOS
(II SEGUNDA PARTE)
Y es que algo que a día de hoy no se suele comentar es el tema de la "acumulación de fatiga" de la herramienta. Una buena herramienta de calidad contrastada como tantas que podríamos citar que hay en el mercado, quizá no pase nada si le damos garrotazos un día o dos, una semana o dos, un mes o dos, pero cuando lleve unos años aguantando garrotazos... Pues igual un día dice ¡Hasta aquí llegué! Por eso pienso que mejor este tipo de método dejarlo para aprendizaje o entrenamientos en entornos controlados y con unidades empleadas únicamente para eso, o al menos unidades que no hayan sido sometidas a un abuso excesivo y prolongado en el tiempo, imaginemos que en una circunstancia comprometida y que de verdad necesitemos ese cuchillo rompa por acumulación de fatiga... ¡Hablamos de dar golpes a un cuchillo con un garrote mientras lo incrustamos en un tocón de madera y en ocasiones de maderas durísimas y con nudos donde inevitablemente además en el proceso la hoja sufre torsión! Es evidente que no tiene nada que ver con el uso normal de un cuchillo, en cuyo caso este artículo sería absurdo, si los cuchillos no se rompieran sometidos al maltrato del "mamporreo", serían casi eternos, todo este lío viene porque los cuchillos se rompen haciendo batoning, y a los hechos me remito, que lo que sobran son ejemplos, incluso aunque sean de los llamados de bushcraft o supervivencia que por dicha moda "se supone deben soportarlo todo".
En el batoning tienen lugar varias tensiones dinámicas a las que se ve sometido el cuchillo por el propio golpeo, y sufre tensiones verticales y laterales tanto cuando es golpeado por el garrote como por el propio cuerpo que intenta atravesar que en muchas ocasiones opone una resistencia tenaz y en no pocas ocasiones el cuchillo queda enganchado y hay que golpearlo y tirar de él para extraerlo y seguir con el proceso, y a ver quien es el guapo que es capaz de hacer todo eso manteniendo siempre las cargas y los ángulos perfectos, por eso resulta determinante aplicar una técnica correcta que al menos minimize en lo posible los daños ¿Cómo no van a romper los cuchillos con técnicas tan deplorables y mal ejecutadas? ¿Porqué se acostumbra a creer que no hay más que llegar y liarse a estacazos de cualquier manera qué vale todo y si rompe es simplemente porque es un mal cuchillo? He visto por ejemplo a este señor en vídeos probar cuatro cuchillos y romper dos, y los dos que han sobrevivido me apostaría unas copas a que con el tiempo si sigue así acabarán cayendo, pero viendo la técnica que exhibe que se podría esperar, no hay más que fijarse en que momento rompe el cuchillo, en el ángulo que lo tiene con respecto al tronco de madera y el ángulo de golpeo, minuto 5:55...
En mecánica se define la fatiga como la pérdida de la resistencia mecánica de un material, al ser sometido largamente a esfuerzos repetidos. Y en términos de fatiga de metales las principales para el caso de los cuchillos entiendo que serían la térmica, la estática o sufrida por exposición a los elementos (principalmente la corrosión) y la dinámica, y es evidente que es esta última la que interviene en el caso del batoning, y esta última es precisamente la causante de mayores daños al ser en este caso el cuchillo "sometido largamente a esfuerzos repetidos", como he dicho, estamos hablando de "acumulación de fatiga":
Al principio del artículo hacía referencia al Kukri Plus Machete que usé en su momento para hacer una demostración de como incluso con un cuchillo que para nada entra en "los cánones de diseño" que establecen en este aspecto las actuales modas, se puede hacer igualmente batoning sin mayor problema (aquí el enlace EL KUKRI PLUS DE COLD STEEL Prueba de batoning), algo que incluso hace unos años había ya hecho en una vídeo demostración para un foro de supervivencia para demostrar que con una técnica correcta incluso se podía hacer aunque fuera la primera vez que lo hiciera alguien en su vida como era el caso (cuchillo que no rompió pese a hacer incluso batoning trasversal) ¡Y lo hice con un cuchillo cebollero de cocina corriente y moliente! Y que igualmente sobrevivió a la prueba (de hecho ese cuchillo se sigue usando a día de hoy en casa en la cocina).
Personalmente sólo lo he hecho a día de hoy en menos de media docena de ocasiones por motivos concretos, a parte de las dos ocasiones ya citadas, en otra ocasión en unas pruebas de hacer fuego en el monte en el que el cuchillo era la única herramienta (sin emplear encendedor), en una review de un cuchillo en concreto (Cold Steel Master Hunter en acero CPM-3V y recubrimiento DLC) y una ocasión más en un curso de supervivencia donde no contaba con otras herramientas más apropiadas con unos pequeños troncos para preparar unas bases para hacer fuego por fricción con arco. En general considero que el batoning es innecesario en la mayoría de las ocasiones que salimos al campo, y personalmente veo innecesaria esta técnica por verdaderos motivos de necesidad, nunca en mi vida lo he necesitado pese a criarme en la montaña e incluso haber sido pastor de niño. Aunque ello no es óbice para que pueda usarlo en el futuro por cuestiones puntuales de verdadera necesidad, deportivas o de entrenamiento, si hay algo que aprecio por encima de todo en estas cuestiones es la flexibilidad, los dogmatismos las más de las veces te llevan a un único camino que no tiene más salidas, pero por norma y costumbre impuesta por una moda sin necesidad, pues como que no, de ser así y por lo ya explicado, es claro que esta moda tiene más serios inconvenientes, que ventajas...
Saludos.
A la primera parte... LA TEMERARIA MODA DEL BATONING EN EL USO MODERNO DE LOS CUCHILLOS (I)
En el batoning tienen lugar varias tensiones dinámicas a las que se ve sometido el cuchillo por el propio golpeo, y sufre tensiones verticales y laterales tanto cuando es golpeado por el garrote como por el propio cuerpo que intenta atravesar que en muchas ocasiones opone una resistencia tenaz y en no pocas ocasiones el cuchillo queda enganchado y hay que golpearlo y tirar de él para extraerlo y seguir con el proceso, y a ver quien es el guapo que es capaz de hacer todo eso manteniendo siempre las cargas y los ángulos perfectos, por eso resulta determinante aplicar una técnica correcta que al menos minimize en lo posible los daños ¿Cómo no van a romper los cuchillos con técnicas tan deplorables y mal ejecutadas? ¿Porqué se acostumbra a creer que no hay más que llegar y liarse a estacazos de cualquier manera qué vale todo y si rompe es simplemente porque es un mal cuchillo? He visto por ejemplo a este señor en vídeos probar cuatro cuchillos y romper dos, y los dos que han sobrevivido me apostaría unas copas a que con el tiempo si sigue así acabarán cayendo, pero viendo la técnica que exhibe que se podría esperar, no hay más que fijarse en que momento rompe el cuchillo, en el ángulo que lo tiene con respecto al tronco de madera y el ángulo de golpeo, minuto 5:55...
En mecánica se define la fatiga como la pérdida de la resistencia mecánica de un material, al ser sometido largamente a esfuerzos repetidos. Y en términos de fatiga de metales las principales para el caso de los cuchillos entiendo que serían la térmica, la estática o sufrida por exposición a los elementos (principalmente la corrosión) y la dinámica, y es evidente que es esta última la que interviene en el caso del batoning, y esta última es precisamente la causante de mayores daños al ser en este caso el cuchillo "sometido largamente a esfuerzos repetidos", como he dicho, estamos hablando de "acumulación de fatiga":
"En ingeniería y, en especial, en ciencia de materiales, la fatiga de materiales se refiere a un fenómeno por el cual la rotura de los materiales bajo cargas dinámicas cíclicas (fuerzas repetidas aplicadas sobre el material) se produce ante cargas inferiores a las cargas estáticas que producirían la rotura. Un ejemplo de ello se tiene en un alambre: flexionándolo repetidamente se rompe con facilidad, pero la fuerza que hay que hacer para romperlo en una sola flexión es muy grande. Es un fenómeno muy importante, ya que es la primera causa de rotura de los materiales metálicos (aproximadamente el 90%), aunque también está presente en polímeros (plásticos, composites,…), y en cerámicas".Un cuchillo con el que se mantiene esta práctica del batoning a lo largo del tiempo, incluso durante años en algunos casos, creo que visto lo visto está acumulando fatiga desde el primer día, otra cuestión distinta es cuanta y en que proporción a lo largo de su vida para que finalmente rompa y yo simplemente me limito al hecho de poner sobre aviso que cuidado que cuchillo escogemos para según que actividades, que trato le damos, y para que podemos luego necesitar de él, una cosa es hacerle unas pruebas razonables para descartar defectos de fabricación y otra bien distinta "torturarlo un día si y otro también", si nos rompe en la parrillada del domingo ya ves tú que problema, pero si en el futuro nos rompe en una situación comprometida donde dependa en gran medida de él nuestra supervivencia, por haber tenido la costumbre durante años de darle garrotazos innecesariamente en situaciones donde podíamos usar otras herramientas más apropiadas, igual nos da la risa... Y no es para nada descabellado que inconscientemente se piense que siempre será así, acostumbrados a que si rompe el cuchillo no pasa nada porque no se depende de él para nada, ya que se está usando en situaciones deportivas o de ocio sin mayor transcendencia vital, y pues eso, devuelta en casa pues ya se cogerá otro que no pasa nada.
Al principio del artículo hacía referencia al Kukri Plus Machete que usé en su momento para hacer una demostración de como incluso con un cuchillo que para nada entra en "los cánones de diseño" que establecen en este aspecto las actuales modas, se puede hacer igualmente batoning sin mayor problema (aquí el enlace EL KUKRI PLUS DE COLD STEEL Prueba de batoning), algo que incluso hace unos años había ya hecho en una vídeo demostración para un foro de supervivencia para demostrar que con una técnica correcta incluso se podía hacer aunque fuera la primera vez que lo hiciera alguien en su vida como era el caso (cuchillo que no rompió pese a hacer incluso batoning trasversal) ¡Y lo hice con un cuchillo cebollero de cocina corriente y moliente! Y que igualmente sobrevivió a la prueba (de hecho ese cuchillo se sigue usando a día de hoy en casa en la cocina).
Realizando batoning con un cuchillo cebollero de cocina,
y la primera vez en mi vida que lo hacía...
Personalmente sólo lo he hecho a día de hoy en menos de media docena de ocasiones por motivos concretos, a parte de las dos ocasiones ya citadas, en otra ocasión en unas pruebas de hacer fuego en el monte en el que el cuchillo era la única herramienta (sin emplear encendedor), en una review de un cuchillo en concreto (Cold Steel Master Hunter en acero CPM-3V y recubrimiento DLC) y una ocasión más en un curso de supervivencia donde no contaba con otras herramientas más apropiadas con unos pequeños troncos para preparar unas bases para hacer fuego por fricción con arco. En general considero que el batoning es innecesario en la mayoría de las ocasiones que salimos al campo, y personalmente veo innecesaria esta técnica por verdaderos motivos de necesidad, nunca en mi vida lo he necesitado pese a criarme en la montaña e incluso haber sido pastor de niño. Aunque ello no es óbice para que pueda usarlo en el futuro por cuestiones puntuales de verdadera necesidad, deportivas o de entrenamiento, si hay algo que aprecio por encima de todo en estas cuestiones es la flexibilidad, los dogmatismos las más de las veces te llevan a un único camino que no tiene más salidas, pero por norma y costumbre impuesta por una moda sin necesidad, pues como que no, de ser así y por lo ya explicado, es claro que esta moda tiene más serios inconvenientes, que ventajas...
Saludos.
A la primera parte... LA TEMERARIA MODA DEL BATONING EN EL USO MODERNO DE LOS CUCHILLOS (I)
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