miércoles, 30 de junio de 2021

¿Qué hemos aprendido sobre supervivencia hasta ahora (algunos) verdaderamente importante sobre la actual pandemia?


  O al menos que deberíamos ya haber aprendido, y cuando digo algunos me refiero a aquellos de nosotros que nos dedicamos al estudio de la materia de la supervivencia y el survivalismo de modo contrastado y riguroso, no por supuesto a esa mayoría de personas carentes de flexibilidad que prefieren seguir viviendo ignorando las más elementales conductas para la supervivencia y basando sus comportamientos en "el pensamiento mágico"(1) o sesgos como "el del superviviente"(2), por citar dos de los ejemplos más conocidos y desafortunados de los modos de pensamiento que habitualmente llevan a tomar decisiones erróneas a esta mayoría de personas, o cuando menos bien conocidos por cualquiera que haya estudiado los aspectos más elementales de la psicología en lo tocante a la toma de decisiones.

 Y relacionado con esto tenemos precisamente uno de esos puntos fundamentales verdaderamente importante que deberíamos ya haber aprendido y del que hoy me quiero ocupar, que cuando se trata de sobrevivir en circunstancias o ambientes potencialmente hostiles, la mayoría de las personas que habitualmente nos rodearán en el día a día carecen de la mínima preparación necesaria para que EN ESTOS ASPECTOS podamos confiar ciegamente en ellas y por tanto dejar nuestra vida alegremente en sus manos. Es decir, podremos confiar en ellas en muchos otros aspectos, pero en lo tocante a aspectos vitales, sería un grave error hacerlo sin por nuestra parte hacer la comprobación pertinente (independientemente de su oficio, no fiarse de las apariencias), porque lo más probable es que cuando menos lo esperemos con toda naturalidad nos dejarán vendidos y "con el culo al aire".


 Si, lo sé, esto suena del todo "políticamente incorrecto", el dejar entrever que en circunstancias como las de la actual pandemia una de las fundamentales recomendaciones que se pueden hacer es "la de no fiarte de tus convecinos", pero entiéndase bien, se trata de no fiarse CIEGAMENTE, porque si algo hay que se debe tener sobradamente claro como principio en lo que nos atañe, es que en aspectos de supervivencia siempre es mejor apostar a la supervivencia en grupo, y por el trabajo en grupo que por el individualista y solitario, y siempre se debe cuidar al grupo, pero el grupo "no es el rebaño", aunque en un momento dado y en apariencia pueda ser coincidente. Ni se puede ni se debe ser antisocial, pero la vida está por encima de todos los convencionalismos sociales, y si en un momento dado las personas que nos rodean pueden poner en peligro nuestra vida o la de los nuestros, aunque sea de modo inconsciente, se debe saber decir NO, así sin más. Es absurdo ver como durante toda esta pandemia he visto (y aún veo) como muchas personas pueden poner en grave riesgo sus vidas "por no quedar mal" o "porque les puedan tachar de raros".

 Son tiempos difíciles para la vida, y la mayoría de nuestras modernas sociedades ya no estaban acostumbradas a tiempos difíciles, ni lo estaban nuestros gobernantes como aquí ya primeramente comenté ESE SURVIVALISMO "TAN DE MODA" Y PORQUÉ NO DEBES FIARTE DE LOS GOBIERNOS, ni lo están la gran mayoría de nuestros conciudadanos como ahora comento, se requiere una capacidad de adaptación y una flexibilidad cognitiva de la que ha quedado patente que los unos y los otros carecían y carecen. Esta atrofia producto de años de gran bienestar general ha hecho que la rigidez cognitiva sea quien guíe sus comportamientos, y que permanezcan obsesionadas y apegadas a sus modos de vida "prepandemia", mientras que contrariamente personas capaces de una adecuada flexibilidad cognitiva no hayan tenido reparo, en primando la seguridad, cambiar sus rutinas tratando de encontrar formas para ello mejores y variadas de realizar su día a día. ¿Qué lo más peligroso es estar en interiores mal ventilados sin mascarilla? ¡Pues poco importa que incluso les invitaran a comer en el interior de un restaurante! Evidentemente dirían que NO, que de ese modo NO y punto, puesto que de ese modo PUDIENDO PONER EN PELIGRO LA VIDA no es negociable, si hay que quedar a comer  se queda, pero en modo conveniente y ADAPTADO a las circunstancias y con garantías adecuadas de seguridad en un interior correctamente ventilado, y si no en el exterior en una terraza con la distancia pertinente. Cuando se tienen clara la prioridad en asuntos vitales como el que nos ocupan, lo que sobran son soluciones, sino siempre aparecerán inconvenientes y nunca se encontrarán porque simple y llanamente se pasa porque se ignoran las prioridades y no se querrán encontrar.


¿Y sino como explicar que se prefiera por ejemplo, y lo que voy a decir son casos reales vistos en numerosas ocasiones personalmente, el comer en interiores sin ventilación ni distancia adecuada con decenas de personas (no olvidemos que está ampliamente demostrado que dos metros no es distancia suficiente en interiores mal ventilados y más cuanto más prolonguemos la permanencia como es el caso de una comida), aludiendo como justificación que está fresco afuera en la terraza o que hace viento? ¿O sea es preferible arriesgarse a contagiarse con consecuencias imprevisibles para la salud e incluso la vida a tener una comida incómoda por pasar algo de frío o tener que estar peleándote con el viento, que por cierto es en ese caso tu mejor aliado? ¿Cómo es posible que te tengas que marchar de un local de restauración en numerosas ocasiones porque se nieguen a servir un menú en el exterior cuando se tiene una estupenda terraza diciéndote que el menú sólo se sirve en el interior? Y lo vamos a dejar aquí, porque podría poner numerosos ejemplos más de auténticos disparates cognitivos y de conducta.

 Decía hace un par de semanas "en mi face", que no me sorprendía que en lo tocante a la PRESENTE pandemia el que nuestros gobernantes ni se enteran, ni quieren enterarse, que era ya del todo evidente que ellos ante todo siguen a lo suyo, la lucha por el poder, pero que era difícil prever hasta este punto que en pleno siglo XXI sociedades supuestamente avanzadas eran y son de facto en general tan profundamente ignorantes. Y que para quienes más allá de las apariencias son estudiosos en profundidad de la psicología humana, pocas veces en la vida se tiene la oportunidad de asistir personalmente a "pruebas psicológicas" que impliquen a toda una población sin excepción en asuntos vitales (de supervivencia). Y que este "experimento" estába resultando ser "acongojante" (por no decir ACOJONANTE! )



 Saludos, y sean prevenidos y prudentes, y cuídense, que viendo lo que se ve esto aún no se ha acabado y todavía es necesario hacerlo, y mucho, que ya se sabe cierto dicho más aplicable que nunca en cuanto a lo comentado... "¡Oigan, suicídense, pero por favor no salpiquen!" 😏

  1. El pensamiento mágico o conocimiento mágico
  2. El sesgo del superviviente o sesgo de supervivencia






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